Fotografías antes y después de una cirugía de aumento de pecho con prótesis anatómicas de 280 cc., incisión realizada en el surco submamario, situándose los implantes en el plano subpectoral. La paciente tras varios embarazos, partos y lactancia materna, presenta un pecho descendido con una ligera caída (ptosis mamaria). Es un caso con cierta dificultad porque los pezones en el preoperatorio están mirando hacia abajo. Los pezones tienen una dirección descendente y debemos colocar una prótesis anatómica que los rote hacia arriba, ya que estos implantes ocupan un volumen importante en el polo inferior y así conseguimos rotar hacia arriba la areola y el pezón. Por lo que en el postoperatorio los pezones ya tienen una posición central o ascendente. Al ser una paciente delgada con un escote muy, muy separado y que no quiere mucho volumen en el postoperatorio, estamos más limitados a la hora de conseguir un mejor resultado en la zona del escote, ya que sin mayor volumen de la prótesis no podemos reducir tanto el ancho del escote.
También hemos realizado una disminución del tamaño del pezón que asoma demasiado (hipertrofia de pezones); extirpamos parte del mismo, pero permitiéndole a la paciente posteriormente dar lactancia porque no alteramos los canalículos o conductos galactóforos, que son los responsables de transportar leche desde los lóbulos mamarios al pezón. La paciente se queda muy contenta, superando satisfactoriamente todas sus expectativas: elección de un implante proporcionado; mejora en la apariencia de su escote; y conservamos un volumen natural y proporcionado de sus pechos, ya que la paciente no busca un aumento de tamaño muy grande sino mejorar la apariencia de ese pecho caído y de esa areola y pezón que mira hacia abajo.