Fotografías antes y después de una cirugía de rinoplastia realizada a una paciente. Lo primero que vemos en las fotografías frontales es que la nariz se encuentra ligeramente desviada y es demasiado larga, por lo que debemos acortar la longitud total de la nariz elevando la punta. Para corregir la desviación lateral romodelamos el hueso mediante Rinoplastia ultrasónica y corregimos el cartílago cuadrangular que separa un orificio nasal del contralateral, que también se encuentra torcido, a través de una septoplastia. En la visión lateral observamos que nuestra paciente tiene una piel fina, lo que hará que se note cualquier irregularidad que hubiera en el trabajo sobre el esqueleto cartilaginoso. Debemos ser especialmente delicados limando aristas o irregularidades en este tipo de piel. La ventaja de tener la piel delgada es que, por lo general, se adapta mejor a la forma que le damos. Corregimos la columela colgante para que no se vea tanto el orificio nasal lateralmente y debilitamos el músculo depresor del septo nasal, ya que se encontraba hipertrofiado y producía demasiado descenso de la punta al sonreír. El dorso es prácticamente recto y la nariz más corta aporta un gesto más dulce y redondea la forma de la cara.
Rinoplastia · Caso 53
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Cada caso particular es único. Diferentes pacientes tienen distintos cuerpos y pueden obtener diferentes resultados. El resultado no sólo depende de la técnica médico - quirúrgica, sino también de cómo reaccione cada cuerpo a la misma, de su recuperación y cuidados post operatorios.