A la hora de programar nuestra operación y, si queremos estar totalmente recuperados para la próxima Navidad, debemos tener en cuenta que la liposucción requiere una preparación previa para conseguir los mejores resultados, especialmente si la acompañamos de una abdominoplastia.
Entonces… ¿Cuándo me opero para recuperarme a tiempo? ¿Qué debo hacer antes de la cirugía? La Dra. Eva Lumbreras, cirujana plástica, explica todos los detalles que debemos tener en cuenta antes de tomar esta decisión.
¿Cuál es la mejor época para realizarme una lipoabdominoplastia?
El mejor momento de operarse depende de muchos factores y es una decisión personal de cada paciente. Pero, si lo que quieres es estar totalmente recuperado para las fiestas navideñas, el otoño es la mejor estación para empezar con la preparación. ¿Por qué? “Muchas personas no saben que antes de la lipoabdominoplastia, es necesario realizar ciertos cambios en el estilo de vida” señala la doctora. Varios de ellos están relacionados con el peso.
En el momento de la cirugía, el paciente que va a realizarse una lipoabdominoplastia debe haberse mantenido varios meses en un peso estable. Una vez que hemos llegado a este peso, es importante que podamos mantenerlo a lo largo del tiempo. Según la doctora Eva Lumbreras, ”un paciente que tiene malos hábitos requiere un cambio en este aspecto para no echar a perder los resultados. La liposucción no es la solución contra el sobrepeso, muchas personas desconocen esto y no mejoran su estilo de vida, por lo que acaban volviendo al estado anterior a la operación”.
¿Cuánto debo adelgazar para hacerme una abdominoplastia?
Es importante saber que no existe un peso ideal para poder operarse, lo que sí puede orientarnos acerca del exceso de grasa corporal es nuestro IMC (relación entre el peso y la altura). “Normalmente esta medida debe estar por debajo de 30 para poder realizar la cirugía. Si la cifra es mayor significa que podemos estar ante un caso de obesidad y, por lo tanto, no es recomendable operar” afirma la Dra. Lumbreras. “La cirugía con sobrepeso no consigue los resultados adecuados y la pérdida o ganancia de peso a posteriori puede empeorar los resultados de la operación” añade.
Por estos motivos, el momento idóneo para empezar con los trámites para la cirugía de lipoabdominoplastia, sobre todo en caso de presentar sobrepeso, es el otoño. Llegar al peso aconsejable puede llevarnos cierto tiempo, y el otoño es una buena época para asegurarnos de que estaremos totalmente recuperados para lucir nuestra nueva figura este invierno y, sobre todo, la próxima primavera.
Ventajas de la cirugía plástica en meses fríos
El otoño o el invierno son épocas idóneas para realizarte una cirugía plástica, especialmente la lipoabdominoplastia, porque dispondrás de más tiempo para la recuperación de cara al verano.
Otro de sus beneficios es la comodidad respecto a la faja. La Dra. Lumbreras declara que “durante el postoperatorio de una liposucción con abdominoplastia las pacientes tienen que llevar una faja durante un tiempo determinado. Esta prenda comprime la zona operada y llevarla en verano puede ser algo incómodo”. Además, durante los meses más frescos llevamos más prendas de ropa, así que será más fácil esconder la faja postoperatoria para que no se vea y así pasar desapercibidos si es lo que deseamos.
Las bajas temperaturas también pueden ayudar a que el proceso inflamatorio tras la cirugía sea menor, además de reducir la posibilidad de que aparezcan edemas postoperatorios. Esto también favorece la curación de las cicatrices: si no la cuidamos correctamente, el sol y el sudor de los meses más cálidos pueden ser perjudiciales.
Estas son solo algunas de las ventajas que tiene operarse en estaciones más frías, pero el momento de la cirugía es una decisión personal que depende de factores externos. Elijas el mes que elijas, desde nuestra clínica te acompañaremos a lo largo de todo el proceso, desde tu primera consulta hasta tu última revisión. Pide cita con nosotros y te proporcionaremos una valoración personalizada.