La elección entre prótesis anatómicas o redondas dependerá de muchos factores.
La elección entre prótesis anatómicas o redondas a la hora de llevar a cabo un aumento de pecho dependerá de muchos factores. Aunque tradicionalmente asociamos los implantes mamarios anatómicos con la naturalidad en el resultado de una operación de aumento de senos, también es cierto que podemos conseguir un resultado perfectamente natural con implantes redondos, siempre que evaluemos bien el caso y escojamos la prótesis redonda más adecuada.
Evolución de la operación de aumento de pecho y tipos de prótesis mamarias
Desde que en la década de 1950 se comenzaron a hacer las primeras operaciones de pecho mediante prótesis han sido muchos los avances en cuanto a la técnica, seguridad y calidad de los implantes utilizados.
Es la intervención de cirugía estética más demandada en todo el mundo y es clave que la calidad de las prótesis implantadas sea máxima. El cirujano plástico debe utilizar la mejor prótesis de seno disponible, ya que en eso radica la viabilidad de los implantes a medio y largo plazo.
Hoy en día para las prótesis de alta calidad no hay una fecha de caducidad concreta, aunque se recomiendan controles ecográficos periódicos posteriores a la intervención con el fin de identificar una incipiente rotura de los implante mamarios.
Las prótesis que utilizamos en FEMM están rellenas de gel de silicona de alta cohesividad, que permite los resultados más naturales tras la cirugía. Así conseguimos un tacto natural y la palpación de los implantes de senos es menos notable, reduciendo de esta manera el “efecto rippling”.
Prótesis redondas o anatómicas
Los tipos de prótesis mamarias más habituales por su forma son dos: la prótesis redonda y la prótesis anatómica.
El Dr. Eduardo Avilés Martín, uno de nuestros cirujanos plásticos, nos explica que la prótesis redonda consigue más volumen en la parte superior del pecho, y la prótesis anatómica conserva la forma natural de un pecho.
Ambas se colocan en un plano profundo, debajo del músculo pectoral en la mayoría de los casos; o bien bajo la fascia muscular en las circunstancias que así lo requieran.
Para introducir el implante hacemos una incisión en la zona inferior de la areola, o bien en el surco submamario o en la axila según cada caso en particular.
Es importante recordar que el implante de seno no influirá en la lactancia materna ni alterará las revisiones que el ginecólogo te hace periódicamente. Tampoco hay inconveniente para realizar mamografías, ecografías u otras pruebas diagnósticas que pudieras necesitar.
Además del material del que están hechos los implantes, también ha evolucionado y mejorado la seguridad y los controles de calidad a las que las prótesis se someten.
Diferencias y técnicas de implantación de las prótesis anatómicas y redondas
Implantes redondos: técnica de implantación
No es posible conseguir un resultado natural con implantes de senos redondos en determinadas pacientes muy delgadas o con poco músculo pectoral, aunque el cirujano plástico es quien evaluará tu caso particular y te aconsejará tu mejor opción.
Así, según nos dice el Dr. Avilés Martín, si buscas un resultado más llamativo, con un escote más lleno, optaremos por implantes redondos; ya que podremos conseguir igualmente una total naturalidad y una perfecta y armoniosa adaptación a tu morfología corporal, si tu cirujano sabe cómo hacerlo.
Aunque hoy en día con la técnica y experiencia adecuadas también conseguiremos resultados absolutamente naturales con prótesis redondas en pacientes no extremadamente delgadas. Así conseguiremos un escote y un polo superior del pecho más lleno.
Implantes anatómicos: técnica de implantación y postoperatorio
En nuestros días el aumento de pecho es una intervención técnicamente sencilla y los materiales utilizados son de la más alta calidad. Si quieres un resultado lo más natural posible, optaremos por unas prótesis mamarias anatómicas. Son las más indicadas para pacientes muy delgadas y aunque aumentan el volumen del escote, lo hacen de una manera natural. Son también las más indicadas en casos de mamas tuberosas.
Aunque la técnica de implantación de uno u otro tipo de prótesis mamaria es similar, el aumento de senos con prótesis anatómicas requiere un bolsillo a medida y un extremo reposo de los brazos en el postoperatorio para evitar que los implantes pudieran rotar, con la consecuente deformidad del pecho (ya que son más gruesas por lado que por otro).
Posibles complicaciones tras una intervención de aumento de pecho
Debemos ser consciente de que la operación de aumento mamario con prótesis puede tener complicaciones y que los implantes, cada día más seguros y duraderos (los laboratorios con los que trabajamos ofrecen una garantía de por vida en caso de rotura), no en todos los casos son para siempre, pudiendo sufrir roturas o deterioro suficiente para su retirada o sustitución.
Las principales complicaciones que pueden dar lugar a dicha retirada o sustitución de implantes, sean anatómicos o redondos, son las siguientes:
- Rotura del implante: la rotura puede ocurrir como resultado de una herida o de un fuerte traumatismo, durante una mamografía agresiva o sin causa aparente.
- También es posible que se pueda dañar el implante en el momento de la cirugía. Una prótesis dañada o rota no puede ser reparada; los implantes rotos o desinflados requieren cambio o retirada. Las prótesis no siempre tienen una vida ilimitada y eventualmente requerirán cirugía de recambio.
- Contractura capsular: el tejido cicatricial que se forma internamente alrededor del implante puede contraerse y hacer que la prótesis se haga redonda, firme y en determinados casos avanzados, dolorosa. La dureza excesiva de las mamas puede ocurrir al poco tiempo de la cirugía o al cabo de años. Aunque no se puede predecir si ocurrirá una contractura capsular sintomática, generalmente se da en menos de un 3% de los casos. El tratamiento para la contractura capsular puede requerir cirugía, cambio del implante o retirada del mismo mediante explantación.
- Rotación del implante: este riesgo está asociado a los implantes anatómicos, ya que son más voluminosos en la parte inferior del pecho. Si se gira un implante anatómico, el pecho aparece alterado en su forma y obliga, si no se recoloca solo, a cambiar las prótesis. Este giro de los implantes anatómicos se produce en un porcentaje mínimo (menos del 2%) de las intervenciones de aumento de pecho y no está en relación con una mala técnica quirúrgica, sino con una falta de adherencia de las prótesis al tejido que las rodea. La operación de recambio de prótesis de anatómicas a redondas es sencilla y de pronta recuperación, ya que el bolsillo ya quedó hecho en la primera operación de aumento de pecho.
- Seroma: puede ocurrir un acúmulo de líquido alrededor del implante que conlleve un aumento de tamaño de la mama afectada. Su principal motivo de aparición son los traumatismos o fuertes golpes en el pecho, aunque en ocasiones puede aparecer sin causa aparente. Si esto ocurre (incidencia menor del 1%) se requiere tratamiento médico y punciones para extraer el líquido. En algunos casos puede ser necesario retirar las prótesis y recolocarlas pasados unos meses. En pacientes en las que el seroma se produce muchos años después de su implantación hay que descartar la presencia de un linfoma anaplásico de células grandes.
Implantarse prótesis mamarias anatómicas o redondas en FEMM
En FEMM Cirugía y Medicina Estética todos los cirujanos plásticos trabajamos con implantes de reconocida reputación y que cumplen la normativa española dictada por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) y por las Autoridades Sanitarias Europeas (Certificación CE).
Como resumen, con cualquiera de los dos tipos de implantes mamarios podemos conseguir un aumento de senos con resultado natural dependiendo del pecho del que parta cada paciente. Será tu cirujano plástico quien valore contigo el tipo de prótesis adecuada a tu caso particular, teniendo en cuenta tus deseos concretos, pero siempre seleccionando unas prótesis de alta calidad y máxima seguridad.